FRANCO DANIEL GÓMEZ
El mes de octubre no se olvidará. Finalmente, después de muchos años de desearlo, los seguidores de la banda que le dio sentido al rock como espectáculo, Kiss, podrán disfrutar en México de su espectáculo en Guadalajara, donde tienen pautado un show para el 2 de octubre en el Estadio 3 de Marzo, añadiéndose a las fechas que darán en Distrito Federal y Mazatlán.
La banda se encuentra en su habitual gira mundial, esta vez denominada ‘The Hottest Show on the Earth’ y antes de llegar a tierras aztecas realizarán una serie de presentaciones por varias ciudades estadounidenses, la última en California, el 25 de septiembre.
Kiss realiza un show basado en temas de su último disco ‘Sonic Boom’ (2009) y los combina con infaltables clásicos de su larga discografía, como ‘Rock n’ Roll All Nite’, ‘Black Diamond’ y ‘Detroit Rock City’, pero la duración del concierto no rebasa las dos horas de espectáculo de acuerdo con los conciertos mostrados en la primera parte de la gira denominada ‘Sonic Boom Over Europe’, y las fechas de su actual gira por Norteamérica; actualmente Kisss está integrada por Gene Simmons (bajo), Paul Stanley (guitarra), Eric Singer (batería) y Tommy Thayer (guitarra).
La última vez que pisaron México fue en 2004 en el Palacio de los Deportes, donde actuaron en 1997 y dos años después llegaron con ‘Psycho Circus’ al Foro Sol.
SHOW DE ALTURA
La palabra épica puede defi nir el concepto de Kiss sobre el escenario. Llamaradas de tres metros de altura, explosiones por todos lados, una plataforma hidráulica que eleva a las alturas a los integrantes de Kiss, una pantalla digital de grandes dimensiones, dos pantallas laterales y una escenografía ambientada con monitores y el logotipo luminoso del grupo. Se trata de parte del equipo que conforma el espectáculo que la banda neoyorquina, fundada en 1972, mostrará en su nueva visita a México, donde cuentan con una de las aficiones más fieles del mundo.
Hay dos momentos sorpresa en el show: Gene Simmons caracteriza su ‘dragón diabólico’, el cual escupe sangre y fuego, además levanta el vuelo hasta las alturas del escenario; mientras tanto, el guitarrista Paul Stanley sale ‘volando’ del escenario a una plataforma ubicada entre el público, como lo ha hecho desde hace varios años montado en una base metálica para cantar ‘I Was Made For Lovin’ You’.
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